
Grandes fueron las expectativas que generó en nuestra zona Oriental cubana el posible paso del Huracán Gustav, sin embargo, fue a dar a la Isla de la Juventud y la provincia de Pinar del Río. Por aquellas tierras Occidentales, los vientos arrasaron la naturaleza y todo tipo de construcción, las viviendas y los locales de todo tipo. Las desvastaciones son totales y deprimentes.
Nosotros estamos muy bien y cuidándonos junto a la gente con las que convivimos en Guantánamo. Por acá sólo han caído algunas lluvias que han venido muy bien dada la alta cantidad de tierras que habían aradas para ser sembradas de todo tipo de productos agrícolas y para lo que se esperaban esta agua. Ahora, aunque los caminos de tierras estén hecho fango, la gente esta contenta de poder esperar buenas cosechas.
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