
Ya estamos en Cuaresma y es tiempo de conversión, que significa cambiar de camino, transformarse, hacernos personas nuevas. Centrarse en el pasado no puede ser bueno. No hace más que perdernos en el laberinto de nuestros yoes, de nuestros errores, de nuestras equivocaciones, de nuestros pecados. De lo que se trata es de levantarse y salir adelante. Convertirse es levantar la vista, mirar a Jesús y seguirle. Convertirse es ver la realidad tal como es, tal como la ve Jesús. La realidad son las cosas que nos rodean, las personas con las que nos ha tocado vivir, los acontecimientos que suceden a nuestro alrededor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por visitar nuestra página. Puedes firmar tu comentario y debajo, escoger la opción anónimo si no tienes cuenta en google...