Domingo XXII del Tiempo Ordinario. ¡Cuánto amor anónimo! ¡Cuánta entrega gratuita! ¡Cuánto gesto desinteresado, que por serlo, ni siquiera es noticia, y hasta cabe pensar que el mundo se destruye por el odio, la guerra, la infidelidad! Porque no nos acordamos de los que de manera oculta aman, de los que vigilan en la noche, de los que permanecen fieles. Ciudadredonda.org.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por visitar nuestra página. Puedes firmar tu comentario y debajo, escoger la opción anónimo si no tienes cuenta en google...